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Galletas de mantequilla con cerezas

Galletas de mantequilla con cerezas

Galletas de mantequilla con cerezas, sencillo y delicioso

Las galletas de mantequilla son una de las recetas más sencillas de hacer. Además, la masa se puede congelar y las podemos sacar y hornear cuando más nos apetezca. Sin duda, son perfectas para mojar en el café y en nuestro caso las hemos añadido nuestro producto estrella, las cerezas del Valle del Jerte. Aunque también se pueden rellenar con mermelada, con cerezas congeladas o incluso, con ciruelas.

Si tienes niños esta receta de galletas de mantequilla con cerezas es perfecta para elaborarla con ellos. Y es que es una receta tan sencilla que hasta los niños podrán prepararla. ¿Nos ponemos manos a la obra?

Ingredientes de las galletas de mantequilla con cerezas

Ingredientes

  • 250 gr de harina
  • 125 gr de azúcar
  • 125 gr de mantequilla
  • 1 cucharadita esencia de vainilla
  • 1 huevo
  • Cerezas

¿Cómo elaborar estas galletas de mantequilla con cerezas?

Elaboración

  1. En un recipiente mezclamos la mantequilla y el azúcar hasta que quede una masa homogénea. Es importante que la mantequilla esté a temperatura ambiente para que sea más fácil de moldear.
  2. Cuando estén bien mezclados los ingredientes agregamos una cucharadita de esencia de vainilla.
  3. Posteriormente agregamos la harina tamizada y mezclamos bien todos los ingredientes.
  4. Lavamos las cerezas, las partimos por la mitad, desechamos el hueso y las hacemos trocitos.
  5. Ahora es el momento de dar forma a las galletas. Para ello, hacemos bolitas y las aplastamos con un rodillo.
  6. Una vez que esté la forma hecha, ponemos los trocitos de cereza sobre las galletas de mantequilla. Las colocamos sobre un papel film y las introducimos en la nevera durante una hora aproximadamente.
  7. Precalentamos el horno a 180° C.
  8. Colocamos las galletas de mantequilla con cereza en una bandeja de horno, las pintamos con un huevo batido y las horneamos durante unos 10 o 15 minutos. Cuando los bordes estén dorados las sacamos, no importa que estén blanditas porque cuando se enfrían se endurecen.
  9. Dejamos que se enfríen ¡y a merendar!